Problemas de dietas bajas en grasas.

Hacer una dieta baja en grasas no es lo mismo que reducir el consumo de grasas. Por lo general este tipo de dietas te recomiendan cantidades de grasas que están por debajo de lo mínimo saludable, y es que te guste o no, el organismo necesita grasas para funcionar bien y estar saludable.

Una dieta baja en grasas es una dieta insuficiente en nutrientes y calorías, esto para los Deportistas es muy malo, porque si no hay grasas en el cuerpo el organismo tiene que recurrir al glucógeno. Resultado: fatiga crónica, difícil recuperación y bajo rendimiento.

Asimismo, el organismo echará mano de las proteínas por lo que el deportistas perderá fuerza y masa muscular, lo que aumenta su riesgo de sufrir lesiones. Esta dieta disminuirá tus niveles de vitaminas A, D y E, vitaminas liposolubles importantes para todo deportista.

Llevar una dieta baja en grasas también afecta a los ácidos grasos esenciales (omega 3 y 6), que resulta en problemas de la piel y presión sanguínea.

Entonces, una reducción drástica de grasas no es la respuesta para el exceso de peso. Te trae problemas de salud y te hace recuperar los rollitos que creías perdidos.

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