Tras polémica detención de niño, modifican aplicación de ley Baker
Carla De Castro
Las imágenes de un niño de siete años saliendo esposado de una patrulla de la policía escolar el pasado mes de enero, causaron tal revuelo que la administración de escuelas de Miami Dade ha decidido modificar la aplicación de la ley Baker.
La Ley de Salud Mental de Florida, también conocida como la Ley Baker (Baker Act, en inglés), planteaba que cuando un niño mostrara evidencias y representara un peligro para él o para los que lo rodean fuera arrestado y trasladado a un centro de salud para realizarla evaluación psicológica involuntaria.
El nuevo protocolo que empezó a implementarse la semana pasada dicta las siguientes normas:
- que se contacte a los padres del menor , así como personas adicionales autorizadas para ayudar en el caso de una crisis.
- exigir la consulta y aprobación de un oficial de alto rango,
- mejorar la capacitación en la intervención de crisis, y agotar todos los medios a su disposición antes de solicitar la intervención policial.
- El personal escolar deberá acompañar a un estudiante durante un procedimiento de la Ley Baker.
- que se utilize los servicios privados de transporte médico para su traslado y no una patrulla de policía.
El video de la discordia
Cuando Mercy Álvarez la llamaron desde el colegio de su hijo Coral Way K-8 jamás imaginó que minutos después presenciaría una escena que jamás olvidaría: su hijo siendo esposado por la policía escolar, presuntamente por haber agredido a una maestra.
La madre del menor pese a su indignación por lo que estaba sucediendo, decidió grabar el hecho para hacer eco del mismo, al tiempo que consolaba a su hijo con evidente nostalgia.
Las reacciones de las imágenes no se hiceron esperar; unos consideran que la medida está justificada, mientras que otros aseguran que fue abuso policial. Incluso algunas personas alegaban que la Ley Baker se usara en exceso en las escuelas para expulsar a los estudiantes cuando la escuela no sabe cómo lidiar con ellos.
“Supuestamente mi hijo empujó a la profesora, le haló el cabello y la golpeo”, dijo Álvarez al alclarar que se refiere a un “supuesto” porque aún no ha visto un video que lo demuestre. En ese sentido, agregó que si ese fuse el caso, no apoya ese comportamiento pero que deben investigarse las razones por las cuales se llegó a ese punto. “Nadie me puede quitar el derecho de pedir una investigacion”, dijo con firmeza.
Por su parte, el personal de la escuela alegaba que no era la primera vez que el niño se comportaba de forma agresiva y que anteriormente habian contactado a la madre por episodios similares. Ambos padres sostienen que su hijo pudiese ser víctima de acoso en la institución, pues antes no había mostrado tal comportamiento.
La vocera de las escuelas públicas del condado Miami Dade, Jackie Calzadilla, describió el incidente de la siguiente forma: “Un estudiante comenzó a comportarse erráticamente y golpeó a una maestra. Debido a una gran preocupación por el estudiante y para garantizar su seguridad, y la de quienes lo rodeaban, fue restringido de acuerdo a la ley Baker y transportado al hospital (Nickalaus) para ser evaluado”.
Álvarez alega que su hijo, quien fue dado de alta ese mismo día, no padece ningún trastorno psicológico que justifique la utilización de la ley Baker. Por tal motivo, instaba a las autoridades a que revisaran el empleo de dicha ley porque, a su juicio, le crearon un trauma psicológico al niño.
Mercy Álvarez confesó que no puede ver el video que ella mismo grabó sin que le afecte emocionalmente, y que a pesar del apoyo que ha recibido de parte de otras madres, tomó la decisión de retirar de la escuela a su hijo mayor de nueve años; pues a raíz de ese suceso ha perdido la fe en el sistema escolar.
Las nuevas medidas también fueron aplaudidas por Rolando Fuentes, padre del niño que fue esposado, pues considera que la ley fue “muy mal interpretada en el caso de su hijo y de muchos otros, … y creo que ahora muchos niños van a estar protegidos”.
Según datos del Baker Act Reporting Center de la Universidad del Sur de la Florida, el número de casos aumentó casi un 50 por ciento entre el año fiscal 2010-11 y el año fiscal 2015-16. Entre julio del 2015 y julio del 2016, se realizaron más de 32,000 exámenes psiquiátricos involuntarios con niños de Florida, según datos del Baker Act Reporting Center de la Universidad del Sur de la Florida.
El distrito escolar de Miami-Dade indicó que entre julio del 2017 y el 25 de enero del 2018, se realizaron 133 exámenes de la Ley Baker por casos originados en las escuelas.
“Tratarlos como adultos no es la solución”
La psicológa Christina Balinotti, fundadora del programa académico Universidad de la Familia, Ahora Sí! (dirigido a la formación de padres y familias), considera que la deteción de un niño nunca es adecuada aunque el propósito sea evitar daños mayores.
“Tratarlos como adultos no es la solución. Sus cerebros se encuentran en formación, por ende, son inmaduros para procesar la violencia que conlleva dicha situación. Así que la detención del niño puede favorecer una respuesta de mayor agresividad como consecuencia de la injuria emocional infligida”, aseveró la experta.
Con notable seguridad, opinó que la ley Baker no debió ser aplicada en este caso a pesar de que sea aparentemente el único recurso disonible. “Esto indica el atraso que sufrimos en materia de control de conductas violentas en niños y adolescentes. En medio del hiperdesarrollo tecnológico de nuestro tiempo, nos encontramos, paradójicamente, subdesarrollados en materia de alternativas más saludables para ser aplicadas en estos casos”, sostuvo.
En esa misma línea, la Dra. Balinotti resaltó que no se deben ignorar este tipo de comportamientos en los niños, y que la comunicación es vital para detectar, entender y solucionar este tipo de problemas de conducta.
“Los padres deben recordar que si no le enseñamos límites a nuestros hijos con amor desde el hogar, la sociedad se los aplicará con violencia”. Por tal motivo, la autora del libro “From Mothers to Daughters” (De Madre a Hijas), exhorta a las instituciones que impulsen charlas serias y profundas acerca de cómo manejar estos casos, cada día más frecuentes, de conductas violentas en niños.
After School Program
En nuestra ciudad, existe una fundación que trabaja con adolescentes que son considerados en “riesgo” por el personal tanto en escuelas públicas como charters y que atráves de un programa extraescolar (After School Program en inglés), que los motiva a desenvolverse en un ambiente mas tranquilo y crear conciencia en la prevención sobre el uso de drogas, el abuso y el acoso escolar.
La fundación Parks and Police 4 Kids (PP4K) en la Ciudad de Doral, es una organización sin fines de lucro, y que desde el 2006 ha trabajado en conjunto con la Policía de Doral beneficiado principalmente a adolescentes a través de programas sociales, recreacionales y educativos orientados para crear un ambiente positivo y seguro en nuestra ciudad a fin de prevenir la delincuencia juvenil.
Los participantes reciben tutoriales un mínimo de cuatro días a la semana después de la escuela en las áreas donde más tienen dificultad. Luego participan activamente con miembros del departamento de la Policía de Doral, en las áreas de deportes, actividades al aire libre, prevención del abuso y acoso, seguridad, uso seguro de internet, etc. “La idea es que formen un lazo de confianza con los oficiales de la polícia, al mismo tiempo que aprenden a protegerse de agentes externos como son las drogas, alcohol, malas influencias, etc”, expresó Elizabeth Canchola, Chair de la Fundación PP4K.
“Hemos visto como estos muchachos cambian su actitud, mejoran sus calificaciones escolares, su autoestima mejora considerablemente y eso mismo los impulsa a mejorar”, comentó Canchola.
Estos niños son monitoreados durante su evolución en el sistema escolar. Una vez que llegan a secundaria son invitados a regresar al programa como ayudantes para realizar trabajo comunitario, al cual también se invita a los padres.
Este programa es uno de los más exitosos de la fundación PP4K, por lo que representa una posible solución para aquellos que han manifestado cambios de conducta o dificultades de aprendizaje en ciertas materias. Y lo mejor de todo es que es completamente gratuito.